En esta oportunidad, nos convoca un tema de gran importancia para la historia aeronáutica de nuestro país; se trata del primer vuelo de un avión a reacción sobre nuestros cielos, que a su vez marca el inicio de la era del “Jet” en la Fuerza Aérea de Chile.
Fueron cinco aviones De Havilland DH-115 “Vampire”, los adquiridos por la Fuerza Aérea de Chile, y procedentes desde Inglaterra llegaron embalados en cajones. Transcurridos 25 días desde que comenzó su ensamblaje en uno de los hangares de la antigua fábrica de aviones Curtiss ubicada en Los Cerrillos, que para ese entonces estaba transformada en maestranza de la Linea Aérea Nacional, se pudo dar por finalizado el proceso de armado del primero de los “Vampire”, que realizadas las verificaciones de rigor, quedó a disposición para realizar las primeras pruebas de vuelo.
Fue así, como el 28 de abril de 1954 George Errington, piloto de pruebas e ingeniero británico de la compañía De Havilland, despego pilotando el DH-115 J-03 en un vuelo de aceptación que se prolongó por alrededor de una hora. Al día siguiente, la aeronave volvió a elevarse por los cielos chilenos, esta vez transportando también al Comandante René Ianiszewski , quien aprovechó para recordar aspectos técnicos del pilotaje de estas aeronaves. Al siguiente día 29 de abril, el De Havilland DH-115 “Vampire” J-03, decoló nuevamente, esta vez llevando al mando en los controles al Comandante Ianiszewski en un vuelo que tuvo una duración total de 1 hora y 5 minutos.
Actualmente, el Museo Nacional Aeronáutico y del Espacio, posee dos aviones de este mismo tipo como parte permanente de la colección, los cuales pueden ser admirados de manera gratuita por nuestros visitantes. Les recordamos a todos aquellos que deseen asistir a nuestras instalaciones que el Museo Aeronáutico abre sus puertas de martes a domingo desde las diez de la mañana hasta las cinco de la tarde.