Las especiales y complejas circunstancias vividas en Chile al momento de desarrollar esta exposición itinerante, que año tras año se presentaba físicamente en las zonales Norte, Centro, Sur y Austral, además de diferentes organismos culturales, colegios, universidades, etc., imponen cambios a su formato habitual.
Por ello, la actual edición se difundirá en formato digital a través de la web institucional y mediante enlaces de correo dirigidos a las entidades anteriormente citadas, esperando a futuro retomar su exhibición en paneles como era lo tradicional.
La presente exposición tiene como eje principal la lucha contra incendios desde el aire, actividad que a partir de la segunda mitad de la década de 1960 se volvió imprescindible, ya que fue necesario proteger grandes inversiones forestales que se tornaron relevantes para la economía nacional.
UN POCO DE HISTORIA:
Los inicios de esta actividad aérea en Chile, de manera ya especializada, se remontan al año 1968, ocasión en que se arrendaron aviones CANSO en Canadá, con la finalidad de operar en el combate de incendios forestales.
Posteriormente se continuó arrendando aeronaves de este tipo, incluyendo desde 1971 algunas pertenecientes a la empresa chilena ASPAR Limitada.
Durante las décadas siguientes, paulatinamente, tanto CONAF como empresas particulares, fueron incorporando diversos tipos de aeronaves (helicópteros y aviones) a las labores de combate de incendios.
La procedencia de las empresas a las cuales se arriendan servicios de extinción de incendios es variada, prevaleciendo en los últimos años aquellas venidas de España, Canadá y Argentina.
En el último tiempo Chile se ha visto afectado por incendios forestales de gran magnitud y consecuencias que distan de lo habitual, dentro de los cuales se destacan; los de Valparaíso en 2014 y el de la localidad de Empedrado en 2017.
En la lucha contra estos incendios, la ciudadanía pudo observar a través de los medios de comunicación diversas aeronaves llegadas del extranjero para este fin. Los aviones Boeing 747 denominado “Super Tanker” e Ilyushin IL-76, cariñosamente llamado “luchín” por el público, ingresaron al imaginario colectivo de nuestra sociedad, contribuyendo a fijar en su memoria estos hechos luctuosos de un modo perdurable.
El trabajo aéreo contra los incendios forestales es notoriamente riesgoso. A través de los años muchos han perdido sus vidas en una actividad que va más allá del compromiso comercial intrínseco al cumplimiento de contratos o a la tarea fríamente profesional.
El valor desplegado por pilotos y observadores, junto al espíritu de sacrificio de las brigadas de combate en terreno, han dado protección a bienes y vidas pero pagando un alto precio.
EL COMPROMISO DE LA DGAC:
Una mención aparte merece la labor desarrollada por la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC),la que incluye “Normar y fiscalizar la actividad aérea que se desarrolla dentro del espacio aéreo controlado por Chile (…) y prestar servicios de excelencia de navegación aérea, meteorología, aeroportuarios y seguridad operacional, con el propósito de garantizar la operación del Sistema Aeronáutico en forma segura y eficiente” .
Este control lo ejecuta la DGAC por medio de los Controladores de Tránsito Aéreo, en los aeródromos y zonas donde actúan las aeronaves, para regular el tránsito en las áreas de acción, apartando todo tráfico aéreo y permitiendo la operación segura de estas aeronaves, a la vez de supervisar las comunicaciones y actuar oportunamente en caso de accidentes.
También la DGAC como contralor de la actividad aeronáutica, otorga las licencias de pilotos y mecánicos nacionales y valida las licencias de pilotos y mecánicos extranjeros que participarán en estas funciones, a la vez que extiende los Certificados de Aeronavegabilidad para las aeronaves nacionales y da su reconocimiento a los Certificados de Aeronavegabilidad de aeronaves extranjeras que volarán en Chile.
Al analizar la situación actual de las actividades aéreas ligadas al combate de incendios forestales, puede entenderse como un rubro destinado a crecer con el paso del tiempo. Si asumimos que variables como el cambio climático o la explotación forestal se intensificarán, causando sequía y aumento del material combustible, será evidente la importancia de promover el desarrollo de las capacidades público y privadas pertinentes.
De este modo, esta nueva exposición itinerante, nos muestra lo que ha sido y es hoy la lucha aérea contra incendios, representando una expresión más del valor de lo aeronáutico en nuestra vida diaria, situación que está llamada a permanecer como una constante en nuestro desarrollo como país.
Al final de esta nota usted podrá acceder a la exposición “Combate de incendios desde el aire”, la que se presenta en formato pdf.
Avión Boeing 747-400 denominado “Super Tanker”.
Avión Ilyushin IL-76, cariñosamente llamado “luchín”.
Expo Incendios.pdf (3133k)
